Cómo reconducir un proyecto cuando estás a punto de abandonarlo

Como reconducir un proyecto

Como reconducir un proyecto

Hace casi un par de semanas que no actualizo el blog. Y no es que haya roto mi compromiso con el calendario de uno o dos artículos a la semana.

 

También es cierto que desde enero me ha costado bastante actualizar por situaciones que se han ido dando. Como más carga de trabajo en mis otros proyectos y cosas varias.

 

En concreto, he estado probando nuevas cositas en una de mis tiendas online. Aun estoy viendo resultados, midiendo y he empezado a valorar mis estrategias.

 

Estoy sacando conclusiones muy interesantes que me va a dar para unos cuantos posts y seguro te van a ser muy útiles para tu proyecto.

 

Las vicisitudes de enfrentarse sólo al mundo

 

Si eres bloguero o/y estás al frente de un negocio unipersonal lo sabrás muy bien. Ya se sabe lo que se dice de los autónomos que tenemos una salud de hierro, nunca nos podemos poner enfermos.

 

En mi caso, menos mal, ha sido carga de faena e imprevistos de todo tipo.

 

El caso que el estar un tiempo sin poder actualizar el blog, pensar en lo que debes hacer para volver al ataque y recuperar tu posición, así como la imposibilidad de ver el momento de retomar tu actividad son unas de las causas de abandono de un blog o perdida de la ilusión.

 

Si a estas causas le añadimos el sentimiento de culpabilidad, duda,… y todas las ralladuras mentales que se nos puedan pasar por la cabeza, tenemos la fórmula de cóctel perfecto para abandonar todo tu proyecto.

 

En esos momentos es tan fácil olvidarse de la ilusión del primer día, aquellos pequeños triunfos, la gente que nos sigue y que tanto apoyo nos ha dado, las horas y horas que has dedicado con toda tu ilusión a ese proyecto.

 

Quizás sea exagerado decir que la gente abandona su proyecto porque ha fallado un par de veces. Ni mucho menos quiero decir eso. Eso podría ser un principio.

 

Realmente estoy hablando de lo fácil es que el abandono y la desilusión aparezca tras varias derrotas en el campo de batalla.

 

Estoy hablando de lo débiles que somos a veces cuando estamos en un proyecto solos y al mando.

 

Me refiero como en otras circunstancias, especialmente si estamos en grupo, pequeños avatares, tonterías y paranoias ni si quiera afectarían a nuestro pequeño imperio personal.

 

Parece que el ser humano cuando emprende un proyecto sólo tiene fases de vulnerabilidad extremas.

 

Los miedos parece que se apoderen de tu alma y tus acciones cuando haces algo fuera de lo establecido.

 

Montar una empresa o un blog o hacer algo que no todo el mundo hace y que socialmente no se entiende como un “trabajo”.

 

Y es que socialmente en España tener un trabajo perfecto es algo así como ser uno de los antiguos funcionarios, porque hoy en día ser funcionario no te asegura nada.

 

En España una persona que desea crear algo suyo es un loco y para que no haya muchos locos y para asegurarse que estos locos no puedan jamás llegar tan lejos que puedan entrar en el círculo de grandes empresas.

 

Han decidido ponerte muchas trabas para sacar tus ideas adelante y vivir de ello: Una seguridad social con tasas al alza, impuestos por un tubo, un sistema recaudatorio tan complejo que tarde o temprano tienes que acabar tirando de asesoría con los gastos que eso conlleva.

 

Con todo esto estás obligado a trabajar de gratis una buena temporadita.

 

Encima ves como en otros países tienes fórmulas para ayudar a las empresas en todas sus fases.

 

Aquí el apoyo se reduce a darte una reducción de la cuota de autónomo durante una temporada. ¿Y qué sucede con los que ya son autónomos desde hace un tiempo? ¿Quién nos ayuda? ¿Qué plan existe para hacer que las empresas crezcan y se fortalezcan? NADA. Porque a nadie le interesa que alguien que no tiene lazos sanguíneos con  la élite se cuele en ese selecto club.

 

Por eso no es de extrañar que un autónomo o un empresario o alguien que inicia un proyecto sea un loco. Porque va a trabajar por amor a su trabajo y porque otros se van a encargar que ganes mucho menos de lo que te corresponde.

 

 

¿Qué hago con mis ideas o con mi proyecto?

 

Ya ves que cuando tienes una idea y quieres intentar vivir de ella no te lo van a poner nada fácil. Pero sin embargo no debes abandonarla. Deberías aferrarte a ella. Y llegado el momento luchar contra tus dudas, miedos y percances que te envíe el destino.

 

Porque es tuya y sólo tuya.

 

Porque debes saber trasformar todas las zancadillas en motivación para seguir luchando.

 

Cuando inicio un proyecto en una libreta donde voy anotando la fecha y cada hecho importante para el proyecto que va aconteciendo. A veces anoto como me sentí en ese momento.

 

Cuando me vienen las dudas como si fuera un álbum de fotos familiar, empiezo a hojear esa lista de hechos y recuerdos. Y créeme es una buena medicina.

 

Aunque creo que lo más difícil de controlar son los miedos y dudas. Justo lo invisible. Justo lo no tangible.

No entiendo como puede ser más difícil hacer frente a un hecho imprevisto que aun estado de incertidumbre, miedo y duda.

 

Pero así de rarito es el ser humano.

 

Luchar contra lo invisible sólo está en tu mano. Puedes tirar de profesionales, pero ellos jamás podrán dar el paso por ti.

 

Así que todo está en tu mano.

 

 

Sí, hay luz al final del túnel.

 

Cuando ves que todo empieza a desmoronarse. Tu ilusión y trabajo se escurre entre tus dedos como el agua sin que tengas capacidad de retenerla entre tus manos. Lo mejor es pararse un momento, respirar y reflexionar un segundo sobre lo que estás haciendo y cómo has podido llegar a eso.

 

Y lo más importante reconducir tu proyecto de nuevo. Es importante que esto lo hagas con la cabeza sin contaminación ninguna de tu negatividad, desilusión, miedos y dudas.

 

Esto consiste en empezar de cero con la ventaja que tienes ya realizado mucho trabajo. En olvidarse de tus errores del pasado y darte una nueva oportunidad.

 

Está claro que por hacer esto el mundo no se va a volver de la noche a la mañana de color de rosa. Que tu desilusión y hartazgo se vayan a desvanecer como quien despierta de un mal sueño.

 

Todo va a seguir ahí, pero tu vas a da el paso de auto perdonarte y darte una oportunidad para luchar contra ellos y el mundo. El resto vendrá poco a poco.

 

Cómo reconducir un proyecto cuando estás a punto de abandonarlo

 

Es el momento de reconducir tu proyecto y no abandonarlo. Para ello has de hacer un pequeño análisis de tu proyecto parecido al que seguro que hiciste cuando lo iniciaste.

 

Sólo que ahora ya tienes un bagaje y sabes lo que funciona y lo que no.

 

Al fin y al cabo muchas veces esta fase de miedo, paralización y de repente tener la sensación que no sabes nada de tu proyecto, suele aparecer cuando has completado una fase de tu proyecto y pasas a la siguiente fase.

 

En la red puedes encontrar mucha información sobre como iniciar un proyecto y sus primeros pasos. Pero muy poca sobre lo que debes hacer cuando tu proyecto llega a X nivel de consolidación.

Esto es porque iniciar algo es “fácil” pero llegar a un nivel de consolidación no lo es tanto y pocos llegan a ese estado.

 

Si este es tu caso pese a estar como un trapo, he de darte la enhorabuena porque si estás leyendo esto y aun fluye voluntad y energía dentro de ti. Vamos a pasar a esa dichosa fase que tan atragantada tienes.

 

Tu proyecto no ha acabado aquí ni mucho menos, tu proyecto está empezando justo ahora.

 

Sólo tienes que responder a estas preguntas:
¿Qué querías conseguir con tu proyecto cuando lo creaste? Finalidad y metas que querías lograr.Escribe los tres logros más importantes que has conseguido con tu proyecto (blog, web, tienda online,…)

 

Logro 1:

 

Logro 2:

 

Logro 3:

 

¿Qué es lo que últimamente querías alcanzar y no acabas de conseguirlo?

 

 

Ponte en el lugar de un familiar, amigo,… y mira hacia tu proyecto desde su perspectiva. ¿Qué tres consejos te darían para conseguir la meta que tienes atragantada?

 

Cuando iniciaste el proyecto ¿a quién querías dirigirte?

A día de hoy ¿a quién te gustaría tener como público? Describe el perfil éste.

 

Dime tus tres competidores actuales que te quitan el sueño.

 

Enumera 3 cosas que has visto de tu competencia en general que te resultan muy interesante.

 

¿Cómo podrías las adaptar o/y mejorar esas ideas para incorporarlas en tu blog?

 

Tu objetivo debería ser adaptar esas 3 mejoras o si son muy grandes al menos una de aquí a final de año. Empiezas a tener faena y cosas por las que luchar.

 

Escribe el título de tus primeros 3 artículos en el caso de que tu proyecto sea un blog para tu vuelta al ruedo. No olvides hacer un resumen de una frase contando de que irían.

Post 1:

 

Post 2:

 

Post 3:

 

 

Podría seguir con las preguntas. Pero no quiero marearte. Sino que busques al menos un motivo por el que seguir luchando y recuperar tu ilusión.

 

Para temas más técnicos: redes, SEO, estrategias avanzadas ya te machacaré en otros posts. Ahora has de recobrar tu ilusión y poder para luchar por lo que quieres y tienes.

 

Hay un mal que sufrimos la gente que trabajamos online y que aparece de vez en cuando. A mí me suele pasar esto cuando se me ha ido de las manos el número de objetivos a cumplir.

 

Sus síntomas son los de una astenia continua. Sientes un cansancio o fatiga tanto física como mental. No te cunde nada. Cualquier tarea por pequeña que sea te agota.

 

El cansancio y la monotonía no deben poder contigo.

 

Busca la forma de hacer las mismas cosas de manera diferente y divertidas. Vuelve a tu infancia y convierte tu trabajo de cada día en un juego de niños.

 

Reduce tus tareas. Solo céntrate en unas pocas que sean de vital importancia. El resto serán bienvenidas cuando estés mejor.

 

Cuando estés muy saturado, deja todo y date un paseo por tu ciudad. Tomate un café o lo que quieras en un lugar especial. Y vuelve al ataque cuando te veas listo.

 

No abandones, lucha por todo lo que has hecho.

 

 

Me encantaría que me dejaras un comentario contándome si te ha pasado alguna vez. Ya sabes que si quieres recibir consejo exclusivos, sólo has de suscribirte a mi Newsletter tienes el formulario más abajo.

 

Nos leemos!

 

P.D.: Quizás como vuelta al ruedo este artículo haya sido un poco radical. Justo en primavera y otoño son las épocas más propensas a caer en esa astenia. Yo he tenido una sobrecarga este mes pasado aunque no ha podido con mi voluntad. Aunque hasta la segunda semana de diciembre del año pasado estuve luchando como una loca para superar una de esas fases. Así que tengo mi lucha muy reciente.

2 comentarios de “Cómo reconducir un proyecto cuando estás a punto de abandonarlo

  1. Jesús Wisnes dice:

    Hola Flor, entiendo perfectamente de lo que hablas en tu post, de como te sientes o de esas fases de «astenia» .

    Me siento muy identificado con lo que cuentas y con lo que dices, esa sensación de correr sin parar para no llegar a ningún lado.

    Cuando tengo uno de estos periodos intento aplicarme algo que leí hace tiempo y que hace que esos deseos de abandonar no se conviertan en frustración, venia a decir algo así como que por malos que sean los días siempre a estos les sigue las noches y así sucesivamente, al final lo que cuenta es cuantos días malos y cuando días buenos tienes después de un ciclo.

    Yo cuando me pasa, me paro, recapacito, medito e intento buscar la motivación en mis existos por pequeños que sean y aprender de los errores para que no vuelvan a pasar.

    Joer¡¡ al final me lío a escribir y me enrollo…….

    Buen post, gracias por estar ahí y no dejar este proyecto.

    • Flor Uceda dice:

      Buen consejo!!. Yo hago también algo así. Aunque una cosa es decirlo y otra sufrirlo. La verdad es que se pasa fatal. Bueno ¿quién no lo sabe? Nada te tienes que armar de muuuuchaaaa paciencia contigo misma, aunque todo se pasa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Mmmm... cookies 🍪 las tenemos propias y de terceros pero siempre deliciosas y a punto para mejorar nuestros servicios y darte la mejor experiencia en nuestra web.